| TRENTON - El Fiscal General Jeffrey S. Chiesa, emitió hoy una nueva directiva estatal que refuerza la ley para amplias las investigaciones y sancionar los delitos de trata de personas que tienen que ver con el sexo y la mano de obra así como para identificar y rescatar a las víctimas de trata de personas, facilitarles servicios integrales a las víctimas, y adiestrar a los agentes policiales en reconocer las señales en lo que se refiere a la investigación en trafico de seres humanos en la investigación y otros delitos.
La investigación y las sanciones a los que cometen los delitos de trata de personas, es una prioridad importante del Fiscal General Chiesa. Hoy también anunció la creación de la Unidad de Trata de Personas (Human Trafficking Unit) dentro de la División de Justicia Criminal, al dotar de un teniente, un sargento y un detective para trabajar con Vice Fiscal y el detective ya asignado para combatir estos delitos. El personal adicional se asignará según sea necesario. La Unidad de Trata de Personas incrementará la capacidad de la División de Justicia Criminal cumplirá una labor mas afectiva a largo plazo, para combatir los delitos de sexo, mano de obras y las investigaciones de tráfico se seres humanos, coordinación con las autoridades locales, del condado, estatales y federales. También trabajará para liderar en los esfuerzos de capacitación, hacer cumplir la ley, supervisar y resolver estos casos, y proporcionar servicios a las víctimas de la trata de personas.
“Cuando cumplí mi trabajo como Fiscal federal, yo tuve la supervisión de los casos de trata de personas y aprendí de primera mano por qué se le denomina la esclavitud moderna", precisó el Fiscal General Chiesa. "Los traficantes de personas toman las personas con mas desventajas, ya sea por su juventud, el estatus migratorio o la falta de apoyo familiar o comunitario – y su vez le roban su libertad, sometiéndolos a la prostitución forzada. Estas víctimas de la explotación, la degradación y la tortura se ocultan a menudo en las esquinas sin luz de nuestra sociedad. Tenemos la intención de ubicarlas, y ayudarlas a sancionar a los responsables de este tipo de esclavitud “, agregó Chiesa.
New Jersey es un lugar privilegiado para la trata de personas a nivel interno e internacional, debido a su céntrica ubicación, entre el área metropolitana de Nueva York y la región tri-estatal como Filadelfia, Baltimore y Washington, DC. Se trata del estado con más densidad en población en los Estados Unidos y tiene la mayor proporción de la tercera parte de los residentes nacidos en el extranjero casi el 20 por ciento. Además de la alta de concentración de Inmigrantes en el cuadrante noreste del Estado, y también existen muchos trabajadores agrícolas migrantes en otras áreas, incluyendo más de 300 campamentos de trabajadores migrantes y un promedio de 32 000 trabajadores agrícolas migrantes y los miembros de la familia que llegan a trabajar a New Jersey cada año.
De 2007 a 2011 533 niños de New Jersey, fueron reportados como desaparecidos por el Centro Nacional para Menores Desaparecidos y Explotados (NCMEC), entre ellas 34 niños sospechosos de estar involucrados en la prostitución. Para el mismo período, NCMEC difundió informes de alrededor de 3.725 cibernéticos (Ciber-Tipline) relacionados con la explotación sexual de los niños. El FBI cree que los proxenetas del norte de New Jersey trafican ilegalmente con niños que son víctimas en Nueva York y otras ciudades con fines de prostitución, y el área de Atlantic City y son el blanco de los delincuentes que explotan a los niños debido a los visitantes a los casinos y complejos turísticos.
Las estadísticas de la División de Justicia Criminal informaron de 179 de víctimas de trata de personas entre el 16 de septiembre de 2005 hasta el primero de marzo de 2012, incluyendo 93 víctimas en asuntos de trabajo, 60 en materia de tráfico sexual, y 26 de la mano de obra y el tráfico sexual. Según el Instituto Nacional de Recursos Humanos, Centro de Distribución y datos (Proyecto Polaris 2010-11), New Jersey, registró 500 llamadas de emergencia acerca de trata de personas en los últimos dos años, el número más alto que ocupa el octavo lugar entre los demás estados.
La Directiva del Fiscal General Chiesa establece la siguiente política:
La política de aplicación de la ley del Estado se encargará de investigar a fondo y de manera justa y procesar las violaciones de [Estatuto de la trata de personas en New jersey] con miras a disminuir en lo posible las violaciones de tráfico de personas. Todas las agencias de aplicación de la ley y los funcionarios estarán obligados a: investigar pronta y exhaustiva las posibles violaciones de tráfico de seres humanos; mantener que las autoridades estatales efectúen las investigaciones de trata de personas para asegurar que todas las investigaciones se coordinan adecuadamente, para proteger la seguridad y la seguridad inmediata de las víctimas de la trata de personas, y respetar y salvaguardar los derechos de estas víctimas.
Las investigaciones rápidas y minuciosas
Como se señala en la Directiva, los delitos de trata de seres humanos a menudo pasan desapercibidos y no se denuncian porque las víctimas se sienten aisladas e impotentes, y con frecuencia no son capaces, por miedo, o de otra manera sin buscar ayuda de la policía. Incluso cuando se trata de una víctima de trata de personas, como una víctima de violencia doméstica, víctima de asalto sexual, persona prostituida, o una víctima de violaciones de la legislación laboral, es poco probable que él o ella se auto-identifique como una víctima, porque temor a ser descubierta y deportada . Además, la policía puede concentrarse en la actividad criminal de la víctima, en lugar de violaciones que la víctima ha sufrido.
Como resultado es fundamental que los agentes policiales puedan reconocer las señales indicadoras de la trata de seres humanos en la investigación de otros delitos que pueden estar asociados con estos casos, y hacer preguntas que pueden poner en peligro la trata de personas. La vigilancia es especialmente crítica en el trato con las empresas y los lugares que la experiencia ha demostrado puede ser utilizada para albergar o encubrir la trata de personas, tales como los clubes de “striptease”, otros negocios de orientación sexual, salones de masajes y salones de belleza.
La directiva establece un plazo de 60 días de su fecha de vigencia, el Director de la División de Justicia Criminal tiene que desarrollar y difundir todas las normas de aplicación de la ley, de investigación de los organismos y protocolos a ser utilizados por los oficiales que investigan una posible violación de trata de personas. Estas normas deberán elaborarse para mejorar la minuciosidad, actualidad, calidad y coordinación de las investigaciones y sanciones en el tráfico de personas, y deberá incluir:
Una descripción detallada de las circunstancias específicas que son relevantes de una violación posible tráfico humano y que deben ser investigados en la medida de lo posible;
\Esos métodos de investigación serán, entre otras cosas, específicamente tienen que ver con el miedo y la intimidación que a menudo las víctimas experimentan de los silencios en la trata de personas. Por ejemplo, cuando sea posible, todas las posibles víctimas y testigos deben ser entrevistados por separado, en el mismo idioma de la persona, y así fuera de la presencia de empleador de la persona, el propietario, o cualquier otra persona que pueda intimidar o inadecuada influyen en la posible víctima / testigo.
La directiva prevé que la División de Justicia Criminal debe desarrollar un programa en línea de la formación de trata de personas de los agentes policiales y los fiscales dentro de los 90 días. Cada estado, condado y la agencia local de aplicación de la ley, a su vez, requiere contar con personal apropiado recibir la formación dentro de los 90 días después que se ponga en vigencia esta directiva. La División de Justicia Criminal también requiere desarrollar programas de estudios sobre la trata de personas para su uso en todas las academias de policía y deben regirse por la Comisión de Formación Policial, así como la Academia de Policía Estatal de Capacitación.
Protección de la Seguridad, Protección y Derechos de las Víctimas
La Directiva obliga a los funcionarios garantizar la seguridad y la seguridad de las posibles víctimas en la trata de personas, mediante notificación con el personal de enlace que el fiscal del condado tenga tan pronto sea posible para que estas personas puedan ser referidas por los servicios. La directiva obliga a la División de Justicia Criminal, en virtud de los poderes otorgados por la Legislatura, trabajar con los fiscales del condado, el Departamento de Salud, el Departamento de Niños y Familias y la Policía del Estado en el desarrollo de las normas de aplicación de leyes y protocolos para proporcionar información y servicios a las víctimas en la trata de personas y de los menores acusados de prostitución. Las fuerzas del orden deben coordinar estos esfuerzos con las autoridades federales bajo la Ley de Víctimas de Trata de Personas, Reautorización de Protección, 2003 (Trafficking Victims Protection Reauthorization Act of 2003).
La Unidad de Trata de Personas de la División de Justicia Criminal, trabajará con las autoridades en todos los niveles y mejorará los esfuerzos de la Fuerza Especial de Trabajo en Trata de Humanos, que fue creada en 2005 en la División de Justicia Criminal. El Grupo de Trabajo se encarga de trabajar con los coordinadores víctima-testigo y los proveedores de servicios a las víctimas para referirse a las víctimas de los servicios integrales. La División de Justicia Criminal trabaja en estrecha colaboración con la Fuerza de Trabajo Regional de los Delitos en Internet contra Niños, encabezada por la Unidad Estatal de Tecnología Digital de la Policía, que se encarga de investigar los delitos relacionados con el uso de las computadoras en la explotación sexual de niños, incluida la pornografía infantil. DCJ y la Policía del Estado también trabaja con el FBI en la Iniciativa Nacional Inocencia Perdida, que tiene dos grupos de trabajo dirigidos a combatir la prostitución infantil en Atlantic City, y en los condados de Essex, Union y Hudson. Una investigación realizada por la División de Justicia Criminal y el Departamento de Policía de Jersey City llevó a la cárcel en 2010 con una sentencia de 18 años de Allen "El Príncipe" Brown, quien dirigía una red de tráfico de personas en la ciudad de Jersey City, en el que las mujeres fueron traídas desde Filadelfia, Camden, Atlantic City y Elizabeth y esclavizadas en una vida de prostitución forzada y adicción a las drogas.
La División de Justicia Criminal mantiene un a línea especial las 24 horas en los casos de Trata de Personas: 877-986-7534. Pueden visitar la Pagina Web: www.nj.gov/OAG/DCJ/humantrafficking
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